17 de abril de 2009

Sueños Dorados


Noche mágica donde tú estás, noche loca,
de risas doradas y besos encadenados;
de los sueños encantados,  fascinado me has dejado,
prendido de ti, ya ves, hasta tuyo quiero ser,
para mía hacerte sin querer...

Labios de seda, pechos de miel, de caricias recorrer,
en el oasis de tu ser quiero descansar, mil noches pasar,
a tus labios pegado y en tus cabellos enredado,
verte cada noche en la alcoba encantada...

Tú piel con mi piel, de tus labios beber
los dulces besos del placer,
en la fuente de los deseos entrar y juntos disfrutar
volcán de pasiones, refugio del soñador, amante y vividor,
que un día de verano, junto a ti se quedó...

Lágrimas en el Corazón

Cual circunstancias que a prueba nos ponen
para nuestro corazón escuchar...
donde los sentimientos vulnerables se vuelven,
el deseo se hace infinito y los minutos eternos.

Loco por amarte pero triste por no tenerte,
dulce y bello amor que nació, como flor en el desierto,
sin saber si me amaras, si un día me querrás

o me olvidaras, si tal vez, solo fui uno más.

Amor verdadero porque de los sentimientos

 eres la razón, para sentirlo vivirlo y disfrutarlo,
para al final sufrir si no es correspondido,
este corazón que ya no puede más
...que solo lágrimas le quedan.

 

El Reino perdido

Cual señora mía, dama de alcoba
que vuestro rey, entre bambalinas perdido andar
sin saber de vos, sin saber si aún le amáis
sin vos saber, si vuestro perfume respirar.
Reflejo del espejo, donde os acicaláis
para vuestro rey, en noches de luna seducir
como ninguna, como vos, dama y señora sabéis ser
donde los amantes de la noche, de princesas se van.
Princesas de castillos encantados, donde vos sois la reina
candilejas que su luz no llega, candela conlleva
reina de reinos perdidos, de sueños de pasiones
solo vos, sois señora y dama, la reina de corazones.
Muy a su pesar, el rey, vuestro amante de marionetas
guerrero, de sueños imposibles, de la luna hechizado
del poema invisible, de la pluma prendado
en papel mojado, escribe cuentos dorados.
Camina descalzo, entre rosas con espinas
como versos del ayer,  otra vez recordar
en el castillo encantado, rodeado de princesas
en un reino perdido, de los sueños rotos.